Big Eyes (Tim Burton, 2014)

Yo creo que lo que Keane hizo fue terrorífico. Tenía que ser bueno. Si hubiese sido malo, a muchas personas no les habría gustado. 

-Andy Warhol

Big Eyes es el nuevo film dirigido y producido por Tim Burton, una  biopic sobre la tortuosa vida de Margaret D. H. Keane, una artista norteamericana que debe encarar el hecho de ser una mujer con un oficio creativo en la década del 50. Inicia con un ritmo de montaje trepidante que me llena de entusiasmo y me hace pensar, que quizás, el viejo Tim ha regresado; sin embargo, a medida que la cinta corre, toda mi ilusión se disipa y tropiezo en un limbo de decepción. Provocado por una historia insufriblemente lenta, acompañada por un conflicto central desarrollado de manera superflua, en donde lo visual no está en equilibrio con los demás elementos de la película.

Un punto a destacar es Christoph Waltz, quien encarna al segundo esposo de Margaret, un artista mediocre sólo capaz de pintar “calles”, mentiroso y descaradamente encantador, el cual se hace protagonista de la historia porque él es el creador del engaño que existe detrás de las pinturas de los niños de ojos grandes. Su contundente actuación sigue la línea trazada en personajes anteriores como el coronel Hanz Landa en Bastardos Sin Gloria o el Dr. Schultz en Django Sin Cadenas.

Se agradece también el trabajo de dirección de arte, que logra ambientar muy bien el mundo en el que se cuenta la historia; por ejemplo, una escena a destacar es el ambiente que se constituye en el supermercado: los alimentos ordenados, las sopas en lata (características de las pinturas de Andy Warhol) y las gigantografías de las pinturas de Keane. La locación conserva una paleta de color centrada en el rojo y azul. Además, se denota un cierto grado de cansancio y locura en Margaret, ve ojos gigantes en las personas (este efecto especial y maquillaje nos distancia de la ficción y nos introduce a una reconocible atmósfera burtoniana), siendo un punto importante en el guion porque ella comienza a pintar un nuevo estilo de arte, el qué firma con MDH Keane, siendo absolutamente de su autoría.

 

Sin embargo, resulta tedioso el hecho de que la protagonista no consiga alzar su voz a través de casi toda la película, pero siendo justos, la conclusión (a pesar de que juega al filo del cliché de “final feliz”), recupera un poco el dinamismo perdido y si bien no es espectacular, cierra de buena manera el filme ya que ella logra demandar a su esposo y sale triunfante honestamente, porque todos en el juicio se dan cuenta que Walter Keane, nunca ha pintado un niño de ojos grandes.

En fin, Tim Burton ya no es el mismo; El Joven Manos de Tijera o Beetlejuice parecieran ser precedentes arcaicos de un Tim que ya no sorprendeCon una realización blandengue, el filme es un ejemplo vivaz del nuevo camino que el director ha recorrido en su última época. No estamos frente a un completo desastre, pero me resulta triste que Big Eyes, se sitúe en mi memoria cómo; una película más.

 

Comentarista: 4/10. Promedio blog: 6/10

Big Eyes. Dirección: Tim Burton. Reparto: Amy Adams, Christoph Waltz, Jason Schwartzman, Danny Huston, Terence Stamp.
EE.UU./Canadá, 2014. Duración: 106 minutos.